El aprendizaje educativo no se desarrolla, únicamente, en el aula. De hecho, las excursiones ofrecen la posibilidad de descubrir paisajes, museos y lugares con encanto. En el inicio del curso escolar, analizamos qué ventajas ofrece esta propuesta.
Las normas de convivencia son muy importantes en la escuela y, por lo tanto, también tienen que aplicarse en aquellos proyectos educativos que se desarrollan más allá del aula.
1. Las excursiones son proyectos muy importantes.
Una excursión se disfruta durante una jornada. Sin embargo, el centro ha planificado en detalle todos los pasos de esa propuesta. Ha coordinado un amplio número de tareas y decisiones que dan forma al programa. Por ello, el itinerario final es entretenido, educativo y divertido.
2. Alimentar las relaciones personales más allá del aula, gracias a las excursiones.
Las relaciones personales están muy presentes durante la realización de una excursión. Es posible alimentar la amistad, el compañerismo y la colaboración en el contexto del propio viaje. Es una jornada completamente diferente a las demás. Por ello, aporta recuerdos, sensaciones y emociones que perduran en la memoria.
3. Las excursiones generan una expectativa positiva.
Generalmente, los alumnos afrontan con más ilusión una nueva jornada en jueves que en lunes. La cercanía del fin de semana genera una expectativa positiva. Lo mismo ocurre con la visualización de una excursión que rompe con la rutina del aula para crear un nuevo contexto de aprendizaje.
4. Las excursiones fomentan la formación práctica.
Es importante que el proceso de aprendizaje esté integrado por una combinación de teoría y práctica. Pues bien, una excursión escolar alimenta el descubrimiento por medio de la experiencia y la interacción con el entorno. De este modo, los alumnos integran los conocimientos teóricos relacionados con el contenido de la excursión en un contexto más amplio en el que es posible establecer una asociación de ideas y una relación de conceptos complementarios.
5. Beneficios del contacto con la naturaleza y los espacios abiertos, en las excursiones.
Existen diferentes aprendizajes que forman parte del contenido de una excursión. La naturaleza, el paisaje urbano y los espacios abiertos están muy presentes en los desplazamientos. Por ello, el itinerario crea el contexto propicio para alimentar la atención, la observación y descubrir detalles que pasan desapercibidos incluso cuando se enmarcan en el entorno próximo. Generalmente, las excursiones para niños se desarrollan en enclaves próximos al lugar en el que se encuentra el centro educativo.
6. Experiencias que los alumnos ponen en común,en las excursiones.
El aprendizaje adquirido durante la excursión va más allá de la perspectiva individual. Las diferentes actividades programadas en el itinerario se ponen en común con otros compañeros. El propio profesor crea el contexto deseado para comentar algunos de los aspectos de la jornada. Por ello, es una ruta que adquiere numerosas perspectivas y todas ellas son valiosas porque completan el puzle de la realidad.
“Los niños aprenden valores que influyen positivamente en la autoestima, en la relación con los demás y en la protección del entorno. Y aprenden mediante la experimentación”